Funcionalismo

El funcionalismo es una corriente que tuvo lugar en Chicago (Estados Unidos), surge a finales de los años 20 y mantuvo una hegemonía en los estudios de comunicación de los años 30 hasta los años 60.

Sus principales exponentes fueron Harold Lasswell, Paul Lazarsfeld, Kurt Lewin, Carl Hovland, Robert Merton, Bernard Berelson, Wilbur Scharamm, Elihu Katz. Y en la perspectiva sociológica; Spencer, Durkheim, Parsons, Malinowsky y Radcliffe-Brawn.

Los principales planteamientos teóricos que identifican a esta corriente nacen de la analogía de las sociedades vistas como organismos: Teorías de la comunicación enfocadas a las funciones de la comunicación masiva; investigación administrativa; doble flujo de la comunicación; líder de opinión; persuasión de masas; teoría de los efectos limitados; agenda setting y la teoría de usos y gratificaciones.

¿Qué estudia el Funcionalismo?

Esta corriente intenta comprender cómo cada elemento de la sociedad se articula con los demás para formar un todo. Sostenía que es mucho más interesante estudiar los distintos recursos que utiliza el ser humano para afrontar su medio, que limitarse a analizar la estructura básica de la mente.

Para Durkheim, los hechos sociales determinan los hechos culturales. Los funcionalistas insisten en que la cultura es un hecho social con una función. Sin embargo, para Parsons, su teoría no simpatiza con una concepción positivista de las ciencias sociales. Su argumento se basaba en defender la necesidad de las personas por centrar la atención en un solo objetivo, lo que las lleva al condicionamiento.

Parsons desarrolló su teoría “Teoría general de la Acción”. Su objetivo era aportar un marco teórico que conjugara diversas disciplinas de las ciencias sociales como la sociología, política, psicología y economía. En cambio Merton, señalaba que los individuos evaluaban su propia situación comparándola con la del grupo de referencia. Él pensaba que la teoría alcanzaba sus objetivos por que contradecía el sentido común, una vez que había sido comprobada empíricamente.

El funcionalismo nace como reacción al evolucionismo y al particularismo histórico. Parte del hecho de que la cultura es una totalidad orgánica en las que sus diversos elementos son inseparables y que se hayan interconectados, teniendo cada uno de ellos una función específica en el conjunto.

Algo que se tiene que destacar es el dogma del funcionalismo, que es el trabajo de campo y que tiene que ser mínimo de 6 a 8 meses, para lo cual se dice que no hay calidad científica si no se tiene este periodo de tiempo; haciendo énfasis en la interpretación de los hechos particulares en una relación al todo (sociedad).

Iván Mendoza

UTEL Editorial