Ingeniería industrial, top de las carreras más rentables

Al momento de elegir carrera hay varios factores que deben tomarse en cuenta, como las habilidades, la vocación y la rentabilidad de  las profesiones.

En el último año aumentó un tres por ciento  el ingreso de las personas con educación a nivel profesional, pero un 29 por ciento para quienes cuentan con un posgrado, de esto podemos concluir que la demanda laboral  aumenta el nivel de sus estándares.

Recientes estudios  han revelado las carreras más rentables y las que más posibilidad tienen de  ser competitivas en el mercado laboral. En el periodo  que comprende el primer semestre de 2012, entre las carreras que con mayor frecuencia aparecen publicadas en las bolsas de trabajo, la de ingeniería industrial, figura como una de las tres más mencionadas, esto se debe principalmente a dos factores: la versatilidad de aplicación de conocimientos  en la industria actual y  el nivel de profesionalización que se requiere.

Es decir, la recurrencia de  menciones tiene que ver con la necesidad de cubrir las labores propias de esa profesión, y la búsqueda de elementos capaces, cuya formación auxilie en las labores de la empresa.

Rentabilidad económica

Respecto a la remuneración que perciben estos profesionistas, la ingeniería industrial también es una de las 20 carreras con más alto ingreso según datos de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social. Dependiendo de las materias  cursadas y la actualización de los planes de estudio, los ingenieros industriales recién egresados llegan a percibir mensualmente un promedio de 11 mil 554 pesos, ubicándose en el puesto 16 de las carreras mejor pagadas.

Respecto al factor vocacional, su área de desenvolvimiento es la administración de recursos financieros y estrategias de negocios, hasta el aprovechamiento de recursos tecnológicos e innovación en ellos.

Los resultados de estos estudios a nivel nacional  han sido comparados con otros en Latinoamérica y Europa, y se observa una constante debido  al continuo desarrollo de las empresas y la necesidad apremiante de potenciar procesos financieros y tecnológicos.

UTEL Editorial