Pon en balance tu enojo y actúa eficazmente

Tú día marcha perfecto, despertaste de buen humor, desayunaste bien y sales con tiempo a tu escuela o trabajo, sin embargo el tránsito está fatal y detona tu enojo ¿te ha pasado?

De acuerdo con el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, el enojo es un “movimiento del ánimo que suscita ira contra alguien”; a partir de esta definición podemos inferir que es una emoción mayoritariamente externa que origina un desajuste en nuestro estado de ánimo. Produce cambios en la personalidad siendo la pobreza de respuesta emocional, el aspecto más destacado.

Es sabido por todos que el enojo condiciona nuestro accionar, nos volvemos reacios a tomar consejos y todo nos genera irritabilidad, solemos tener pocas nociones del control emocional que se requiere para aquietar la ira. En teoría resulta sencillo dar “tips” para intervenir en caso de enojo, no obstante no hay otra manera de canalizarlo que mediante técnicas de relajación.

La relajación produce efectos inmediatos en la reducción de la necesidad de oxigeno, aumenta nuestras ondas cerebrales alfa (asociadas a la creatividad) y disminuye el ritmo cardiaco.

Reaccionar repulsivamente hacia los demás es el peor error; a ti como persona no te gustaría recibir la negatividad del otro, entonces como reza la regla de oro de la ética “trata a los demás como querrías que te trataran a ti “, o “no hagas a los demás lo que no quieras que te hagan.”

A continuación te damos 5 consejos para poner en balance tu enojo y actuar eficazmente:

No todo depende de nosotros. Hay cosas que no podemos cambiar porque no están en nuestro espectro o no nos competen. Se trata de adaptar eso que nos causa aversión en algo con lo que podamos lidiar. Tenemos poder de decisión y de elegir si darle fuerza a lo negativo o no.

Busca puntos de fuga para el estrés. La respiración profunda suele ser lo más recomendado, pero como somos seres únicos e irrepetibles, no a todos les funciona. Puedes darte 5 minutos para escribir un mensaje a una persona especial, ver un video gracioso, recordar algún chiste, hablar con un amigo, etc. Se trata de hacer algo que siempre nos resulte hilarante o confortable.

Apóyate en el otro. Las personas que tenemos a nuestro alrededor, compañeros, amigos, familiares, incluso desconocidos casi siempre estarán dispuestos a escucharnos solo hace falta pedir su atención. Eso te ayudará a identificar qué te hace enojar y no divagar ni hacer más grande esa emoción. Los demás estarán contentos de ayudarte ¿tú no lo estarías?

Desarrolla empatía.  Uno de los principios de la PNL señala que detrás de cada acto hay una intención positiva, trata de identificarla. Cuando aprendas a ser un observador consciente tomarás decisiones salomónicas y no dejarás que nadie rompa con tu balance emocional.

Sonríe a pesar de todo. Tener una sonrisa en el rostro es una táctica infalible para contagiar el buen humor. Cuando sonríes externas felicidad, el cerebro genera endorfinas porque no distingue entre una risa falsa y una auténtica ¡compruébalo!

Adair Rodríguez
UTEL Editorial

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