El uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs), han permitido establecer una comunicación mucho más viable en cualquier parte del mundo. La forma de comunicarse ha evolucionado en diferentes campos, por ejemplo el ámbito educativo.
Actualmente el método enseñanza-aprendizaje no solo puede realizarse de manera presencial, también puede motivarse desde nuevos círculos sociales como redes sociales, blogs o comunidades virtuales, plataformas que han resultado ser complementarias para los estudiantes.
Este tipo de círculos tienden a crear comunidades cooperativas, en donde las personas que tienen intereses en común buscan generar aprendizaje. Cualquier persona tiene acceso a estos sitios educativos, en donde el intercambio es mutuo y los miembros tienden a beneficiar su estudio de manera conjunta.
Los círculos de aprendizaje virtual, están formados por las aportaciones de conocimientos y por la aplicación de habilidades y capacidades que cada integrante otorga, con el objetivo de que la comunicación no se estanque y llegue el término de la interacción.
Esta forma de generar aprendizaje también está diseñada para que el docente conozca sus alcances profesionales.
Diseñar un círculo de aprendizaje virtual no es una tarea fácil y algunos puntos a considerar son:
■ Hacer una apertura correcta del círculo.
■ Planificar proyectos diversos.
■ Realizar intercambio de trabajo entre los participantes.
■ Publicación del círculo.
■ Cierre del circulo.
Cada información generada por los integrantes debe de ser compartida para que incite la retroalimentación, por lo tanto las sesiones no deben ser improvisadas, ya que los pasos y el objetivo pueden desviarse de la meta.
El establecer lazos a través de este tipo de trabajo ayuda a generar pensamiento y opiniones entre los participantes.
Tania Paola Peralta
UTEL Editorial