La educación es la base para tener un mejor nivel de vida. La competencia económica de un país crece conforme aumenta la capacitación y productividad de las personas que lo conforman.
Considerar la labor de educar como un mejoramiento en la calidad de vida, implica asumir la responsabilidad de promover la actualización de las capacidades de elección de las personas, favoreciendo la equivalencia de oportunidades de acceso a recursos para acrecentar su autonomía.
Esta actividad es un elemento clave para superar deficiencias y alcanzar mejoras como la calidad de vida, ya que esta es un importante parámetro que define el nivel de ingreso al que puede aspirar una persona. Se puede decir que a mayor nivel educativo, es mayor el salario que se percibe.
La educación correctamente enfocada es una buena herramienta, capaz de remediar una gran cantidad de problemas económicos y sociales, generando así una mejora sustancial en la calidad de vida de la población y en la situación económica del país, por medio de las habilidades adquiridas que generan un impacto en el desempeño laboral.
Por otra parte, en la actualidad el talento que se recluta en las empresas es fundamental para determinar el éxito o fracaso de un negocio. A medida que estos evolucionan, las empresas necesitan gente con más habilidades específicas, en cuanto a tecnología, idiomas, habilidades interpersonales y multiculturales.
Puesto que el mercado en México ahora es global, hay profesionistas de varias nacionalidades, por lo que ya no es suficiente darse el lujo de conformarse con tener un título, sino pensar en la constante actualización sobre las últimas tendencias y novedades referentes a la profesión, manteniéndose al tanto en cuanto al desarrollo mundial en general.
Si bien, la educación es el camino para un mejor nivel de vida pero la gran demanda en las empresas, crean la necesidad de especialización, así como la constante actualización del conocimiento, permitiendo a las personas poderse diferenciar de los demás, generando mayor competencia para un mejor puesto.
Iván Mendoza
Utel Editorial