Conductas autodestructivas: ¿Qué son y cómo prevenirlas?

Conductas autodestructivas: ¿Qué son y cómo prevenirlas?

Un fenómeno que se observa con más frecuencia en jóvenes y adultos son las conductas autodestructivas. Estas se manifiestan de manera física y sin intencionalidad suicida. El comportamiento ha sido estudiado por la psicología y tiene una variedad extensa en cuanto su clasificación y formas. 

¿Qué son las conductas autodestructivas?

En la actualidad se considera a las conductas autodestructivas como una problemática relacionada a la salud mental, la cual representa una gran preocupación para las diferentes organizaciones del mundo por las consecuencias negativas que genera tanto físicas como mentales en la etapa adulta, limitando el desarrollo y vida satisfactoria de los individuos (OMS, 2016). 

Las conductas autodestructivas implican aquellas acciones que nos infringen daño de manera física y/o emocional. Pueden ser conductas directas como lesionarme de algún modo, conductas autolíticas o de suicidio donde hay un objetivo claro de dañarse; o bien, aquellas conductas que también me perjudican o me dañan de una forma más indirecta: el abuso de comida, de alcohol, de drogas, conductas sexuales de alto riesgo, permanecer en dinámicas relacionales tóxicas con los demás o con la pareja.

Tubert, S. (2000) los considera patrones de comportamiento que pueden responder a una mala regulación emocional, así como a una percepción de sí mismo deteriorada y con una necesidad de ser castigado, con un claro resentimiento hacia uno mismo, donde la culpa puede cumplir un papel fundamental en el mantenimiento de estas conductas autodestructivas.

Las conductas autodestructivas son comportamientos que ponen en riesgo la salud física, emocional o psicológica de una persona. Estas conductas pueden variar en su gravedad y pueden incluir una amplia gama de acciones que afectan negativamente al individuo que las lleva a cabo.

¿Qué tipo de conductas autodestructivas hay?

El ser humano tiende a regirse por el principio de bienestar, hacer todo aquello que le de calma y tranquilidad, así como la evitación de emociones y situaciones desagradables que rompan está equilibrio física y mental; cuando hablamos de conductas autodestructivas estamos actuando en contra de esta necesidad interna de ajuste y estabilidad emocional. A continuación podemos entender cómo se producen o a qué se deben. Algunos ejemplos de conductas autodestructivas comportamentales son:

    • Autolesiones físicas: Incluye cortarse, golpearse o quemarse a sí mismo como una forma de lidiar con el dolor emocional o sentir un control momentáneo sobre sus emociones.
    • Consumo excesivo de alcohol o drogas: El abuso de sustancias puede tener efectos graves en la salud física y mental de una persona.
    • Comportamientos alimentarios perjudiciales: Esto puede incluir la bulimia, la anorexia u otros trastornos alimentarios que afectan negativamente la salud física y emocional de la persona.
    • Conducir de manera temeraria: Participar en comportamientos de alto riesgo en la conducción, como exceder los límites de velocidad o conducir con los efectos del alcohol o drogas.
    • Autoaislamiento social: Alejarse de las relaciones sociales y la interacción con los demás, lo que puede llevar a un aumento de la soledad y la depresión.
    • Exceso de trabajo o agotamiento extremo: Trabajar de manera compulsiva sin darle importancia al descanso adecuado o el equilibrio entre trabajo y vida personal.
    • Auto-sabotaje: Actuar de una manera que perjudica las oportunidades y el éxito personal o profesional.
    • Juegos de azar compulsivos: Participar en juegos de azar de forma obsesiva, lo que puede llevar a problemas financieros y emocionales.
  • Conductas violentas o agresivas hacia uno mismo o hacia los demás

Teorías que nos pueden ayudar a comprender las conductas autodestructivas: 

En cuanto a los estudios efectuados en población no clínica, se han comparado las conductas alimentarias de alto riego (Santos, 2011) en grupos con ausencia/presencia de autolesión. Se ha visto que quienes se lastiman a sí mismos tienen mayores puntuaciones de neuroticismo y más dificultades sociales afectivas, insatisfacción corporal, comportamientos bulímicos, y menores sentimientos de eficacia. Se ha señalado como un factor relevante en ambos comportamientos la desregulación emocional por ejemplo Scherzer (2005) considera que las conductas autodestructivas son un ejemplo de exteriorización de la rabia, tanto contra sí mismo como contra sus cuidadores primarios.

La posición de Tubert (2000) va en la misma línea cuando marca que la actuación autoagresiva como consecuencia del fracaso en elaborar la crisis adolescencial y diferencia el acto que llama “maligno” (impulsivo) del “benigno” como último recurso para relacionarse con la realidad y remarca: “no busca la muerte sino la supervivencia” (pág.105) y lo vincula a las situaciones del contexto familiar.

¿Cómo puedo prevenir las conductas autodestructivas?

Prevenir las conductas autodestructivas es un proceso complejo que requiere un enfoque multidimensional y un esfuerzo continuo. Aquí hay algunas estrategias que pueden ayudar a prevenir o reducir la probabilidad de conductas autodestructivas:

  • Educación y conciencia: Conocer y entender qué son las conductas autodestructivas y sus posibles causas es el primer paso para abordarlas. Tanto las personas que podrían estar en riesgo como sus seres cercanos pueden beneficiarse de informarse sobre el tema.
  • Identificar factores de riesgo: Reconocer los factores de riesgo individuales, como problemas de salud mental, historial de traumas, estrés crónico, abuso de sustancias u otras situaciones difíciles, es esencial para tomar medidas preventivas.
  • Promover una comunicación abierta: Fomentar un ambiente donde las personas se sientan cómodas para hablar sobre sus emociones y dificultades puede ayudar a prevenir conductas autodestructivas. Estar dispuesto a escuchar sin juzgar y ofrecer apoyo emocional es crucial.
  • Fomentar el autocuidado: Promover la importancia del autocuidado y el bienestar emocional es fundamental. Esto incluye asegurarse de que la persona tenga tiempo para el descanso, actividades recreativas y una rutina saludable.

Para la prevención de conductas autodestructivas es importante que siempre haya preocupación por la seguridad e integridad de la persona, es esencial buscar ayuda profesional de inmediato. Siempre se debe tomar en serio cualquier señal de peligro o conducta autodestructiva y busca apoyo de personas capacitadas para abordar la situación de manera adecuada.

Psic. Paola Merino Montoya

Orientación Psicológica

Programa de Éxito Académico y Profesional (PEAP)

Bibliografía:

Scherzer, A. (1994) La familia Grupo Familiar e instituciones. Desde la práctica hacia la salud. Ediciones Banda Oriental. Montevideo.

Santos, B. D. (2011). Autolesión: qué es y cómo ayudar. México, AEMI.

Tubert, S. (2000),), Un extraño en el espejo, España: Ludus editorial.

Organización Mundial de la Salud. (2016). Informe Mundial de la Violencia. OPS.

Organización Panamericana de la Salud. (2019). Mortalidad por suicidio en las américas. OPS