¿La jubilación es el final de mi vida?

Es probable que en nuestra vida hayamos escuchado la palabra “duelo” y asociamos este término al fallecimiento de un ser querido; sin embargo, este concepto hace referencia a cualquier pérdida como la de un trabajo, pareja, amistad, casa, dinero o un ser querido, ya que necesitamos pasar por todo un proceso para aceptar lo que ha ocurrido y adaptarnos a la nueva realidad.

La Jubilación

Al hablar de duelo en el contexto laboral podemos identificar un evento particular: la jubilación, la cual implica el término de una etapa laboral cuando se cumplen ciertos requisitos (por ejemplo, cumplir una edad o tener determinado tiempo trabajando); esta conclusión de labores brinda la oportunidad de acceder a una remuneración periódica.

Desde la perspectiva psicológica «la jubilación puede ser vista como una transición que implica la ampliación, la redefinición y el cambio de papeles» (Carter y Cook, 1995, p. 67, en Chiesa y Sarchielli, 2008).

En México, al cierre del año 2022 el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) contaba con aproximadamente 4.39 millones de pensionados y jubilados en sus registros de población derechohabiente. Este dato supuso un incremento de algo más de 35,000 personas con respecto a la cifra del mes de noviembre. La cifra registró otro aumento a finales de noviembre de 2021, ya que el total de pensionados y jubilados en el IMSS superó los 4.59 millones.

A pesar de continuar recibiendo una remuneración económica periódica, estar jubilado implica que el trabajador cambie la rutina que realizaba: convivir con sus compañeros de trabajo, enfrentarse a los problemas cotidianos de la oficina, ejercer su carrera profesionalmente, etc.; este cambio de rutina puede llegar a ser abrumador para muchos, ya que supone una reestructuración de las actividades cotidianas, por consiguiente, requiere flexibilidad y capacidad de adaptación a las nuevas condiciones.

El apego a la actividad laboral

De acuerdo a la Teoría del apego al rol del trabajo de Carter y Cook (1995), el apego a la actividad laboral puede dificultar la adaptación a la jubilación. Por otra parte, la adaptación a la nueva situación puede ser especialmente difícil para aquellos que muestran una escasa actividad en otros ámbitos de su vida, por ejemplo: no participar en las labores de la casa, colaborar en alguna organización o tener actividades de esparcimiento; es decir, aquellos quiénes dedican su vida solamente al trabajo pueden tener más complicaciones cuando llegue el momento de la jubilación.

En este proceso se pueden identificar tres etapas principales: la de preparación, en donde se aclara gradualmente la actitud hacia la jubilación y también se planifica cómo y cuándo dejará su trabajo; la etapa de las decisiones, en donde se determina la manera en la que se dejará el trabajo; finalmente, la de adaptación, en la cual ya se ha tomado la decisión de dejar el empleo y ahora es necesario hacer la transición a la nueva condición social (Atchley, 1976, en Chiesa y Sarchielli, 2008).

Prepárate para la jubilación

Para prepararnos y afrontar la situación de manera idónea cuando llegue el momento te compartimos algunos consejos que puedes seguir:

  1. Considera que la jubilación es un proceso natural que todos en algún momento pasaremos, esto te ayudará a normalizar el evento en lugar de considerarlo como algo catastrófico.
  2. Ahorra con tiempo, pues sabemos que la economía en el mundo es complicada y en ocasiones guardar nuestro dinero no forma parte de nuestras prioridades financieras; sin embargo, comenzar con un pequeño plan de ahorro personal de acuerdo a tu medida hace que, llegado el momento, tengas una cantidad considerable disponible para tus necesidades.
  3. Identifica qué actividades te hubiera gustado realizar cuando “no tenías tiempo”, pues ahora éste es el momento ideal para esa actividad que siempre quisiste.
  4. Considera realizar algo que no habías pensado, elabora una lista con proyectos que no habías podido realizar.
  5. Mantén activa tu vida social, pues el apoyo es muy importante en esta nueva etapa, así que no dejes de salir con tus amistades, familiares, pareja o hijos; al contrario, ahora tienes más tiempo para disfrutar con ellos y hacer cosas nuevas.

Recuerda, la jubilación es un proceso natural al término de nuestra vida laboral, eso no significa que ya no tengamos nada más que hacer o que la vida se haya acabado; aquí hay tiempo para realizar lo que deseabas hacer, como conocer lugares nuevos y, por supuesto, disfrutar con tus seres queridos una etapa más.

Si te sientes abrumado por el cambio o consideras que no estás preparado para este evento, puedes acudir con un profesional de la salud mental para recibir orientación y apoyo en esta transición.

Psic. Ariana González Trejo.

Orientación Psicológica
Programa de Éxito Académico y Profesional (PEAP)

Referencias

American Psychological Association. (2004). Cómo prepararse para la jubilación. https://www.apa.org/topics/families/prepararse

Armas, R. (2022, 15 de agosto). La jubilación: cómo prepararse psicológicamente. https://www.psicologoencasa.es/como-prepararse-psicologicamente-para-la-jubilacion/

Chiesa, R. & Sarchielli, G. (2008). Prepararse para la jubilación: el papel del apoyo social en la gestión de la ansiedad. Revista de Psicología del Trabajo y de las Organizaciones, 24 (3), 365-388. https://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1576-59622008000300006