Técnica DESC: Comunicación asertiva para el manejo de conflictos

La comunicación humana consiste en la expresión de ideas, emociones, posturas, principalmente; además de que así nos hace visibles y nos valida. Sin embargo, aprender a comunicarse de forma efectiva y armónica no es una tarea sencilla. 

Para ello, existe un estilo de comunicación llamado asertivo, que es definido como: una forma de expresión consciente, congruente, clara y equilibrada, cuya finalidad es comunicar nuestras ideas y sentimientos o defender nuestros derechos a través del respeto y la consideración por el otro (Díaz, 2011). Sus características verbales son: frases como “pienso”, “siento”, “quiero” “hagamos” “me gustaría”, “¿qué piensas?”, “¿qué te parece?” “¿te gustaría?”; las no verbales son: contacto ocular directo, tono de voz firme, habla fluida y pausada, postura directa, manos sueltas y gestos firmes.

Otros estilos de comunicación

• Comunicación pasiva: Se caracteriza por una escasa o nula verbalización de lo que se piensa, y/o siente, evitando actuar por miedo a las consecuencias. El individuo prioriza las necesidades, deseos y sentimientos de los demás. Algunas características verbales son: usar frases como “quizás”, “supongo”, “eh…”, “bueno, no es importante”. Las no verbales: ojos que miran hacia abajo, voz baja, postura encorvada, retorcer las manos. 

• Comunicación agresiva: Defiende en exceso los derechos personales sin tener en cuenta los de los demás. Este estilo suele intimidar e ignorar las necesidades del otro. Sus características verbales son: frases como “Haz lo que te digo”, “Si no lo haces”, “No sabes”, “Deberás”, “Lo haces mal”.  No verbales: Habla fluida/ rápida, enfrentamiento, crítica, humillación, dominación, interrumpe al hablar, mirada amenazante (Therapist Aid, 2017).

La Técnica DESC para enfrentar conflictos interpersonales

Hay una gran cantidad de técnicas para aplicar la comunicación asertiva y cada una de ellas está construida para un fin específico. A continuación, se desarrollará la técnica DESC, la cual fue creada por los psicólogos Sharon A. y Gordon H. Bower que por sus siglas en inglés significa: Describir, Expresar, Específicar, Consecuencias (Bower y Bower, 1991):

• Describir los hechos: en este primer paso, es necesario ser lo más claro, concreto y sencillo posible, evitando críticas o juicios de valor como “mal o bien”. El objetivo de este primer punto es hacerle saber a la persona ¿qué pasó?  Para tal descripción puedes ayudarte de las preguntas siguientes: “¿qué pasó?, ¿cuándo?, ¿en dónde?”. Es recomendable adoptar un tono neutro y un vocabulario simple.

• Expresar los sentimientos: consiste en comunicar los sentimientos que te generó el hecho anteriormente descrito, mismo que pudo haber provocado enojo, tristeza, preocupación o desacuerdo. Para ello, se sugiere utilizar el lenguaje en primera persona: “Yo siento”, “yo pienso”. Cabe mencionar que aquí también se pueden expresar pensamientos, siempre y cuando estos no contengan algún juicio de valor. Por otro lado, en caso de ser necesario, este paso puede ser el momento para expresar la parte de nuestra responsabilidad en la situación.

• Especificar soluciones/ Sugerir Soluciones: consiste en encontrar o proponer acciones que pueden ponerse en marcha para mejorar el problema o situación y que no se repita próximamente. Es recomendable responder a la pregunta “¿cómo mejorar las cosas?”  En ella se puede integrar un cambio de conducta propio o la solicitud de cambio de conducta de la otra persona; se sugiere utilizar las frases: “Me gustaría” “¿Qué te parece?” “¿Me sentiría más cómoda(o) si…”, “¿estarías de acuerdo?” “Quisiera escuchar tu punto de vista”. Las propuestas deben ser constructivas: claras, precisas, realistas y alcanzables. 

• Consecuencias o beneficios: este último paso se refiere a indicar las consecuencias favorables que se tendrían al aplicar el cambio de conducta propuesto y el solicitado. Y si es necesario, también es posible indicar las consecuencias no favorables de una falta de cooperación ante el cambio pedido.

Beneficios de la Técnica DESC

1. Desarrolla habilidades para aprender a manejar conflictos.
2. Permite la expresión de emociones, sentimientos y pensamientos.
3. Ayuda a hacer peticiones claras y de forma concreta.
4. Fortalece tus relaciones interpersonales.
5. Promueve el cambio.
6. Favorece el desarrollo de contextos armónicos y saludables.

Advertencia para prevenir la frustración al aplicarla: El empleo de las técnicas de comunicación asertiva no garantiza que desaparezca el conflicto, pero el aprender a utilizarla maximiza las consecuencias favorables y minimiza las desfavorables en la práctica de tus relaciones interpersonales.

Si consideras que necesitas apoyo para su práctica y ejecución, recuerda que puedes solicitar ayuda al Servicio de Orientación Psicológica de la Universidad.

Referencias: 

Bower, G. & Bower, S. (1991). Asserting yourself. Estados Unidos: Perseus Books.
Díaz, M. (2011). Habilidades de comunicación para la vida cotidiana. Universidad de Cádiz. España. 
Therapist Aid. (2017). Comunicación pasiva, agresiva y asertiva. Disponible en: https://www.therapistaid.com/worksheets/passive-aggressive-and-assertive-communication?language=es