Los tiempos de ahorrar dinero en una cuenta corriente o debajo del colchón han pasado, o al menos ya están en vías de extinción. Los múltiples cambios en una economía compartida por la globalización obligan a que el dinero fluya y esté en constante movimiento, para esto han surgido los sistemas de inversión.
Los sistemas de inversión abarcan todos los modos estandarizados que un sujeto tiene para invertir de modo tal que obtenga ingresos a un plazo fijo; estos incluyen carteras, cajas de ahorros, negocios, bolsa de valores y todos aquellos modos de inversión que se apeguen a un marco legal y resulten rentables para los inversionistas.
Antes de hacer una inversión de cualquier tipo hay que asesorarse jurídicamente, revisar cuál es el estatus de la organización o empresa a la cual se le está apostando, asimismo leer los contratos con detenimiento para evitar fraudes y malversaciones. Este es el primer y más importante paso en nuestra búsqueda de una inversión convincente.
La opción más concurrida para los inversionistas es el depósito en entidades bancarias, la compra de acciones, inversión en bienes raíces etc. Para las personas comunes que desean iniciar proyectos de ahorros e inversión están las cajas de ahorro convencionales o si se quiere ser más osado: la inversión en negocios propios o sociedad anónima.
Los bancos son la opción más fiable para aquellos que se inician como inversionistas, en este modo hay que revisar bien cuál es el GAT (Ganancia Anual Total) y cuál es el monto mínimo para aperturar la cuenta, asimismo ver con detalle los pormenores de los beneficios de uno y otro banco para tomar una decisión sin remordimientos.
Existe la posibilidad de incursionar en la inversión con los HYIP (High Yield Income Programs), Programas de Inversión de Alto Rendimiento. Aquí se invierte cierta suma de dinero, posteriormente se recibe un interés de sus inversiones. Los intereses son pagados cada día, cada semana o cada mes. Las tasas oscilan entre 0,3% y 3% diariamente. El inversionista recupera toda la suma invertida a corto plazo y más tarde comienza a cobrar beneficios.
Hay que tener en cuenta que las empresas quieren pagar los menores intereses posibles,en contraparte los inversionistas, buscan el mayor rendimiento posible con una inversión menor; esto suena y es lógico sin embargo en la práctica se pierde de vista y puede haber desacuerdos.
Para cuidar nuestro capital y aumentar podemos prestar dinero y cobrar intereses, existe la posibilidad de abrir negocios o invertir en un proyecto bien organizado. Hay empresas que constantemente buscan inversionistas, esta es una opción de fiar pero se necesita tener un aval de peso que nos respalde y suficiente capital para invertir.
No dudes en incrementar tu patrimonio con la ayuda de los diversos sistemas de inversión. Estos no son solo para los altos ejecutivos con grandes ingresos, todos los asalariados con cierta estabilidad en su economía tienen la posibilidad de invertir, solo es necesario asesorarse con un especialista y no apostar demasiado sin tener un respaldo económico sustentable.
Adair Rodríguez
UTEL Editorial