Hoy en día, el mundo ya no está regido solo por el sexo masculino, cada vez son más las mujeres que se introducen en el ámbito laboral. Según una estadística del Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática (INEGI) el 48.1% del mundo laboral está conformado por mujeres empresarias, lo que ha generado la necesidad de aprender a equilibrar todas sus actividades.
En la actualidad son ellas quienes se gradúan más rápido representando casi la mitad de la fuerza laboral en las empresas.
Pero, con tantas responsabilidades, ¿cómo pueden obtener el éxito?
Las mujeres exitosas tienen que dividirse entre familia, trabajo, estudio y amistades, por lo que mantener un trabajo formal se hace aún más difícil. Sin embargo el éxito no llega por sí solo, se debe querer lograrlo y buscarlo.
Entre las cosas que debe tomar en cuenta una mujer que desea sobresalir en el mundo laboral desatacan las siguientes:
- Trazar objetivos y metas. Es esencial saber qué es lo que se quiere alcanzar y cuáles serán las estrategias para lograrlo.
- Entusiasmo. La cima no se alcanza de la noche a la mañana; las profesionistas exitosas, antes de actuar, se visualizan y se preparan con paciencia y entusiasmo.
- Confianza. Para alcanzar una meta anhelada se necesita actuar de manera firme. Si el objetivo es un ascenso, se deberá confiar en las capacidades individuales.
- Responsabilidad. Si la finalidad es escalar a un alto puesto, es probable que vengan nuevas responsabilidades, lo que requerirá de reorganizar el tiempo para poder llevar a cabo las nuevas obligaciones.
- Competencia. El crecimiento laboral se obtiene con el aprendizaje diario y el desarrollo de habilidades nuevas.
- Liderazgo. Una forma de demostrar por qué se quiere lograr el éxito, es mostrando una visión de líder, capaz de afrontar cualquier contratiempo que se presente.
Actualmente cada vez son más las empresarias que deciden no sólo atender su carrera, sino también una familia, siendo capaces de gestionar su tiempo y llevar a cabo varias actividades a la vez sin descuidar ninguna.
Solo es cuestión de administrarse bien y decidirse a ser exitosa.
Tania Paola Peralta
UTEL Editorial
Hay que compartir responsabilidades con la pareja y la familia. Es necesario que las actividades que tienen que ver con la educación y crianza de los hijos, además de las labores del hogar, sean realizadas por partes iguales con el fin de descentralizar responsabilidades y que la mujer tenga también espacios para seguirse preparando y asumiendo mayores retos profesionales.